¡ENVÍOS SIN CARGO EN ARGENTINA PARA COMPRAS QUE SUPEREN LOS $AR 30000!

«Gente que baila es un libro único en el sentido más preciso de la palabra: no se parece a nada (aunque fue hecho con todas las lecturas); está a la altura de las altísimas exigencias que Soares solía imponer a los demás cuando leía sus libros (o imaginaba los propios) y tiene una cualidad epifánica que se percibe al leer cualquiera de sus páginas.

A diferencia de las rígidas reglas del género, en estos cuentos lo central son los personajes y no las situaciones; son relatos de pocas páginas pero tienden a expandirse y han sido escritos como si fueran novelas. Los protagonistas se multiplican y se entreveran, sus biografías están narradas con gracia y fuerte densidad histórica; sin embargo, la situación narrativa básica es siempre la misma: un narrador, enconado y romántico, recuerda a la mujer que ha amado y que ha perdido.»

Del prólogo de Ricardo Piglia

Gente que baila, por Norberto Soares

$14.900
Gente que baila, por Norberto Soares $14.900
Entregas para el CP:

Medios de envío

  • Delibooks Avenida Meeks 91, Lomas de Zamora. Horarios a Convenir.

    Gratis
Compra protegida
Tus datos cuidados durante toda la compra.
Cambios y devoluciones
Si no te gusta, podés cambiarlo por otro o devolverlo.

«Gente que baila es un libro único en el sentido más preciso de la palabra: no se parece a nada (aunque fue hecho con todas las lecturas); está a la altura de las altísimas exigencias que Soares solía imponer a los demás cuando leía sus libros (o imaginaba los propios) y tiene una cualidad epifánica que se percibe al leer cualquiera de sus páginas.

A diferencia de las rígidas reglas del género, en estos cuentos lo central son los personajes y no las situaciones; son relatos de pocas páginas pero tienden a expandirse y han sido escritos como si fueran novelas. Los protagonistas se multiplican y se entreveran, sus biografías están narradas con gracia y fuerte densidad histórica; sin embargo, la situación narrativa básica es siempre la misma: un narrador, enconado y romántico, recuerda a la mujer que ha amado y que ha perdido.»

Del prólogo de Ricardo Piglia